VIRGEN DE LAS ANGUSTIAS. COMPATRONA DE VERA. 1888

Se transcribe el texto de la sesión de Pleno del Excmo. Ayuntamiento de Vera en el que se acuerda que la Parroquia inicie el expediente para nombrar a la Virgen de las Angustias como compatrona de Vera, junto a san Cleofás.

Sesión ordinaria del día 11 de marzo de 1888 (libro 190 del AMV, folio 45 vº)

Reunidos los señores concejales que componen el Muy Ilustre Ayuntamiento de esta Ciudad, cuyos nombres aparecen al margen, bajo la presidencia de la misma don Pedro García Soler, con el objeto de celebrar la sesión ordinaria de este día, la que tuvo lugar en la forma siguiente.

Leída el acta de la anterior fue aprobada diose cuenta de los Boletines Oficiales y Gaceta de Madrid y se acordó cumplimentar las órdenes que contienen.

El Señor Presidente expuso que según los antecedentes que se conservan en el archivo municipal y Parroquial de esta población, el día diez de junio próximo hace cuatrocientos años que los señores Reyes Católicos personalmente pusieron sobre la Alcazaba de esta Ciudad el Estandarte de Castilla, desapareciendo para siempre el de la media luna y poblando sus viviendas los cristianos, nuestros ilustres antecesores: que siendo este un acontecimiento de tanta importancia y trascendencia, digno de que se solemnice por la población entera el Cuarto Centenario de la expulsión de los hijos del falso profeta, cree oportuno el que por el Ayuntamiento se acuerde se celebre una solemne función cívico religiosa el día diez de junio próximo, siendo festivos hasta el catorce, en curso, día [en el que] tuvo lugar la primera misa y entrada triunfal de los señores Reyes Católicos don Fernando 5º de Aragón y doña Isabel 1ª de Castilla, con su real séquito. El Ayuntamiento, por unanimidad, acordó, de conformidad con lo propuesto por el señor Presidente.

En la Ciudad de Vera, a veinte y cinco de Marzo de mil ochocientos ochenta y ocho, reunidos en sesión ordinaria los señores que componen el Muy Ilustre Ayuntamiento de la misma, don Pedro García Soler, Alcalde Presidente, don Francisco Cervantes Cano, don Ramón López Martínez y don Francisco Ferrer Ballesteros, primero, segundo y tercer tenientes de alcalde respectivamente, don Diego Segura Peñuela, Procurador síndico, don Antonio Haro Silvente, suplente de dicho cargo, don Ramón Cáceres Cervantes, don Melchor de Haro Reyes, don Francisco Sánchez Muñoz, don Juan García González, don Baltasar de Haro López, don José García Caparrós, don Bartolomé Salas Clemente y don Miguel Caparrós Pinar, regidores de este Municipio, con el objeto de conocer y acordar de los asuntos que a la Corporación competen conforme a las disposiciones vigentes, cuya sesión tuvo lugar en la forma siguiente.

Leída el acta de la anterior fue aprobada. Diose cuenta de los Boletines oficiales y Gaceta de Madrid y se acordó cumplimentar las Órdenes que contienen.

Por el Señor Presidente se mandó dar lectura del escrito moción presentado a su autoridad por el Sor. Procurador Síndico, cuyo tenor literal es como sigue:

Muy Ilustre Señor Alcalde de la Muy Noble y Muy Leal Ciudad de Vera. D. Diego Segura Peñuela, Regidor Síndico de la Corporación Municipal de su digna presidencia, interpretando los religiosos sentimientos de los habitantes todos de esta Ciudad, a ustedes acude respetuosamente y como mejor en derecho proceda, en solicitud de que previo acuerdo del Muy Ilustre Ayuntamiento, se practiquen las diligencias necesarias para que sea declarada Patrona de esta Ciudad Nuestra Madre y Señora María Santísima de las Angustias. Poco ha de decir el que tiene el honor de suscribir en apoyo de su pretensión Vuestra Señoría conoce y sabe muy bien que desde los más remotos tiempos, esta Ciudad viene acudiendo en todas sus necesidades a la Santísima Virgen bajo aquella advocación, tributando la más profunda veneración a la Sagrada Imagen que bajo el título de “Virgen de las Angustias” se ama y venera por todos estos habitantes sin distinción de clases ni condiciones. El fervor y entusiasmo religioso que animó a nuestros antepasados a congregarse el día 22 de Abril del año 1680 y formar la Hermandad de Nuestra Señora de las Angustias con todas las formalidades canónicas, la piedad que estimuló a los que les sucedieron a impetrar1 de la Silla Apostólica gracias y privilegios que les fueron benigna y ampliamente concedidos, no han decrecido con el trascurso del tiempo ni entibiándose con la general indiferencia; antes al contrario, se han ido aumentando de generación en generación, cada una de las cuales hase esforzado por acrecentar los actos de culto con que la honraran las precedentes, y hacer más solemnes y grandiosos los que aprendieran de sus mayores. Las actas de esa Congregación, en las que siempre resplandece el más acendrado amor a la Sra. Virgen de las Angustias, y brillan los esfuerzos por engrandecer las funciones a Ella dedicadas, son irrefragables2 pruebas de la veneración, amor y respeto siempre crecientes, que los habitantes de esta Ciudad han tributado siempre a su Madre y Abogada. Esta veneración y amor universal hacia María Santísima de las Angustias ha adquirido en el presente su más completo desarrollo, [narp]ando las demostraciones de piedad filial en verdadero entusiasmo y en edificante delirio con motivo de las solemnes Novenas, que con tanto esplendor como recogimiento, con tanta suntuosidad como fervor se da en está actualmente honrando. La magnificencia del Templo tan profusamente iluminado y tan ricamente embellecido, la solemnidad inusitada con que aquellas se verifican; la apiñada multitud que con la más religiosa compostura ocupan no tan sólo el dilatado espacio de aquél, sino todas sus avenidas también; todos, en fin, cuanto estamos presenciando en estas verdaderas solemnidades, que consagra nuestro amor a Nuestra Señora de las Angustias, evidentemente patentiza la ilimitada confianza que en su protección benéfica tenemos todos depositada. Es pues llegado el momento de que esta veneración y amor sean expuestos a la Autoridad religiosa a quien corresponda y del modo que mejor proceda, para que se satisfagan los unánimes deseos del vecindario obteniendo la declaración de Patrona de esta Ciudad de Nuestra Madre y Señora María Santísima de las Angustias, con la que recibirá sanción oficial, lo que con indelebles caracteres está ya grabado en el corazón de todos y sin contradicción proclama el unánime sentir de estos religiosos habitantes. Por lo que a Vuestra Señoría suplico que habiendo por presentada esta moción, se digne dar de ella cuenta a la Muy Ilustre Corporación de su digna Presidencia, a fin de que acuerde lo que más oportuno considere. Vera 19 de marzo de 1888.

Terminada por el infrascrito Secretario la lectura del escrito precedente, en el que se interpretan los religiosos sentimientos de todo este vecindario y aduciendo poderosas razones que fueron escuchadas con ostensible satisfacción por todos los asistentes, se hacía la pretensión de declarar Patrona de esta Muy Noble y Muy Leal Ciudad a la Santísima Virgen de las Angustias. Abierta discusión sobre ella fue pedida y usada la palabra por todos los señores concejales, quienes unánimemente consideraron digna de aprobación la moción presentada, expresando en elocuentes palabras y sentidas frases, que no tan sólo la aprobaban sino que la hacían cada uno suya, puesto que ella era la expresión fiel y verídica de los piadosos deseos de los habitantes de esta Ciudad, quienes, sin distinción de clases y condiciones, profesan en más acendrado amor a María Santísima de las Angustias, venerando con religioso entusiasmo la Sagrada Efigie que con el título de “Virgen de las Angustias” recibe sagrado y amoroso culto en esta feligresía, que acude a Ella en todas sus necesidades, encontrando siempre el consuelo que la pide y necesita.

Visto por el Señor Alcalde Presidente el tan unánime como entusiasta parecer de todos los individuos de la Corporación, reasumió todo lo expuesto con elocuente palabra, expresando a la vez que no tan sólo se apropiaba y hacía suya la moción del Señor Procurador Síndico, que sentía la más grata satisfacción en que el Ayuntamiento que tanta honra le cabía en presidir, la tuviese también de llevar a feliz término la declaración de Patrona de la Santísima Virgen de las Angustias, con l oque se han de realizar los vehementes deseos y anhelos de este vecindario, que con tanto gusto venían confirmando oficialmente lo que es ya antiguo hecho en el fondo de los corazones de todos. Fundado en estas consideraciones y visto el sentir de todos, proponía y unánimemente fue aceptado por la Corporación:

1º. Que se aprobase, no por unanimidad sino por aclamación, la moción del Señor Procurador Síndico

2º. Que en su virtud se solicitase de quien corresponda la declaración canónica de Patrón-Compatrona de la Santísima Virgen de las Angustias en unión del Patrón San Cleofás

3º. Que se dirija atento oficio al Señor cura en comisión de esta Parroquia a fin de que se sirva manifestar los trámites que ha de seguir este expediente y Autoridad Eclesiástica a quien proceda dirigirlo y

4º. Que siendo fiesta popular el día diez de junio por conmemorarse en él la fecha en que fue rescatada esta Ciudad de la dominación árabe por los Reyes Católicos, que personalmente enarbolaron la bandera Nacional sobre la Alcazaba de esta población, sería de desear que en ese día se celebrase la festividad de Nuestra Señora de las Angustias, lo cual debe pedirse igualmente en las preces que para el Patronato se dirijan.

Y no habiendo otros asuntos de que tratar, se levantó la sesión, firmando los señores concejales conmigo, el Secretario, de que certifico (…)

Transcripción del original por Manuel Caparrós Perales

08-06-06

1 Conseguir

2 Imposibles de contrarrestar

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