Vera cuenta con cuatro contenedores destinados a la recogida de ropa usada y complementos, mediante el convenio de colaboración firmado ayer por el alcalde de Vera, Félix López, y la responsable del Servicio de Cáritas Koopera en Almería, Mari Carmen Torres Galdeano. En la rúbrica del acuerdo estuvieron acompañados por Francisca García, concejala de Servicios Públicos; María Rosa Cortizo Alonso, directora de Cáritas Parroquial; la colaboradora María José Cano González, y la voluntaria de acompañamiento de Káritas Koopera Laurence Bouffiuox.
El proyecto textil Cáritas Koopera Almería, creado por Cáritas Diocesana y la Red Social Koopera, con una trayectoria de más de 25 años, persigue, entre otros objetivos, según manifestaba Mari Carmen Torres, “que la ropa sea una herramienta para promocionar a la persona con proyectos textiles que ya funcionaban en otros lugares y, además, dignificar el acceso a la ropa de las personas que lo necesitan a través de unas tiendas, de espacios con corazón, tiendas de segunda mano que estamos poniendo en marcha en distintos sitios”. El problema ético de la ropa es una de las preocupaciones de Cáritas Koopera: dónde va la ropa usada, dudas acerca de si tiene sentido facilitar ropa a las personas que lo necesitan. De otro lado, la apuesta por el empleo y el respeto por el medio ambiente son aspectos inherentes a la filosofía social de Cáritas Koopera. Se trata, en definitiva, de que a través de la ropa que la gente deposita en los contenedores de Cáritas Koopera, y siempre bajo procesos éticos y sostenibles social y ambientalmente, crean puestos de trabajo de inclusión con el objetivo final de devolver al mercado laboral ordinario a quienes, por motivos diferentes, se han visto fuera de él.
Para el alcalde de Vera, Félix López, “este proyecto solidario encaja perfectamente en el municipio veratense dado el carácter de generosidad de los vecinos y residentes. Nos sentimos partícipes de una labor social que aúna tres vertientes: prestar ayuda a quien la necesita, generar empleo y contribuir a la sostenibilidad medio ambiental”. El Ayuntamiento de Vera ha autorizado la ocupación de espacio públicos para la colocación de los contenedores donde se puedan efectuar donaciones de ropa. En este punto, señala Mari Carmen Torres, “que, por favor, la ropa que depositen quienes así lo deseen vaya en bolsas, que no vayan prendas sueltas porque esto facilita mucho la labor de selección”. Insiste Torres en resaltar que “toda la ropa es útil, hasta la que está rota, porque la que no se emplea para vestir a personas con necesidades económicas, se puede reciclar”.
La instalación de los contenedores, al igual que en los numerosos municipios donde están ya emplazados, son ignífugos y están diseñados contra actos vandálicos y para impedir la introducción de otros residuos o su manipulación desde el exterior. Cáritas Koopera asegura que toda la ropa donada y recogida de los contenedores tiene un uso ético una vez pasado por un exigente proceso de higienización y etiquetado.