Pocos son los colectivos que tras cincuenta años, en emotivo reencuentro, puedan celebrar el inicio de sus estudios. Pues bien, he tenido la dicha de formar parte de ese colectivo que, con el nombre Promoción Magisterio 65/68, tuvo a bien, gracias a la diligencia de sus organizadores, llevar a feliz término esta reunión de maestros almerienses que iniciamos estudios en la Escuela Normal de Magisterio en el año 1965.
Los organizadores, – Francisco Maldonado, Gabriel Hernández, Encarnación Espinosa, Amelia Guerrero, Antonio López, Manuela Martínez, Isabel Martínez y José García – tras un arduo y laborioso trabajo de búsqueda, hicieron posible, gracias a las nuevas tecnologías, reunir a más de un centenar de compañeros repartidos por toda la geografía nacional y parte del extranjero.
La fecha elegida para el reencuentro no podía ser mejor: 14 de febrero de 2015, Día de los Enamorados; el lugar de contacto, inmejorable: el Salón Noble del Círculo Mercantil de Almería; y el restaurante Lamarca, sitio de almuerzo y baile.
Citados a las 10,30 horas en el día y lugar referido, Francisco Maldonado, quien fuera Delegado Provincial de Educación, acompañado de nuestras próceres e ilustres profesoras Dª. Concha Zorita, Dª. Mari Carmen Moreno y Dª. Carmen Gisbert, pasó lista, como otrora se hacía, para refrescar la memoria tras medio siglo de separación. Muchos no nos conocíamos; otros, sí. Habían pasado cincuenta años. ¡Dios mío! ¡Cómo habíamos cambiado!
Dª. Concha, con afectuosas palabras dirigidas a sus antiguos alumnos, nos dio otra clase de Filosofía como cincuenta años antes, con magistral estilo, impartía. Nos recordó, entre otras cosas, sus materias objeto de estudio: Psicología, Ética, Lógica, Metafísica y Ontología y, sobre todo, puso hincapié en el recordatorio de los razonamientos deductivos: los silogismos, con sus premisas y conclusión. Fue, cómo no, un placer, para satisfacción nuestra, oír su proverbial disertación. Creo que, en esos momentos, nuestra mente estaba invadida por nuestros propios recuerdos, es decir, la reconstrucción de vivencias pasadas. Junto a Dª. Concha, dos insignes docentes: Dª. Mari Carmen Moreno, profesora de Pedagogía, y Dª. Carmen Gisbert, de Educación Física, también fueron receptoras del saludo, respeto y admiración de sus antiguos alumnos.
Tras el reencuentro, la Promoción de Magisterio 65/68 tenía prevista una visita guiada al casco histórico de la ciudad. El arqueólogo, Antonio Andrés Díaz Cantón, dirigió la misma y pudimos visitar, con explicación incluida, la Escuela de Arte, el convento de las Puras, la Plaza Vieja y Puerta Purchena, entre otros.
Sobre las 14,30 horas, el restaurante «Lamarca» fue el lugar para culminar el final del evento narrado. Tras un suculento y sabroso ágape, así como la entrega de un ramo de flores a las profesoras citadas, concluyó el evento con baile y canciones de la década de los sesenta, década ésta en que iniciamos nuestros estudios de Magisterio y sirvió para forjar una estrecha y larga amistad que se vio consagrada con este emotivo reencuentro cincuenta años después.